Parece ser que el radio de acción de ese maligno ser conocido como chupacabras se ha expandido mas allá de las fronteras donde habitualmente campaba a sus anchas. En el barco del misterio de Playmobil hemos recibido una instantánea sorprendente y porque no decirlo, aterradora, que nos quitará el sueño...
La Guardia Cerril de Cuescos del Arzobispo, provincia de Zamora, recibió hace unos días el aviso de un asustado labriego que boina en ristre decía haber matado de forma casual, a la par que violenta, a un extraño ser que perseguía a las ovejas por el páramo. Allí se presentó la menetérica donde se encontraron a este espantoso engendro, junto a la botella de Anís del Mono que el labriego le había lanzado y que le causó con toda seguridad la muerte mientras agarraba una oveja churra por los cuartos traseros lanzando aterradores berridos.
El cuerpo del extraño animal fue levantado por el juez y trasladado al bar del pueblo donde será mostrado al público junto a los jamones que orgullosamente tiene a bien curar al relente el tabernero.
En otro orden de cosas, en el vecino pueblo de Palominos del cura, sigue desaparecido el niño Jose Bernardo Concocacola, que salió de su casa disfrazado para la fiesta de navidad del cole pero no llegó nunca a la representación... las autoridades opinan que está de botellón pero este extremo está por confirmar.
La Guardia Cerril de Cuescos del Arzobispo, provincia de Zamora, recibió hace unos días el aviso de un asustado labriego que boina en ristre decía haber matado de forma casual, a la par que violenta, a un extraño ser que perseguía a las ovejas por el páramo. Allí se presentó la menetérica donde se encontraron a este espantoso engendro, junto a la botella de Anís del Mono que el labriego le había lanzado y que le causó con toda seguridad la muerte mientras agarraba una oveja churra por los cuartos traseros lanzando aterradores berridos.
El cuerpo del extraño animal fue levantado por el juez y trasladado al bar del pueblo donde será mostrado al público junto a los jamones que orgullosamente tiene a bien curar al relente el tabernero.
En otro orden de cosas, en el vecino pueblo de Palominos del cura, sigue desaparecido el niño Jose Bernardo Concocacola, que salió de su casa disfrazado para la fiesta de navidad del cole pero no llegó nunca a la representación... las autoridades opinan que está de botellón pero este extremo está por confirmar.
1 comentario:
Decía (escribo por segunda vez) que se le ve un poco perjudicao al Chupacabras... ah que por cierto, seguro que se cambiaría el nombre a Chupakabras en espalla, por aquello de los mensajes SMS y los makrobotellones, así, todo con "kases"
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